El psicoanálisis aborda a la persona como un todo, ya que ningún aspecto del sujeto se puede excluir en el momento de analizar sus problemas, conflictos, síntomas o sufrimientos.

Todos los individuos son producto de su historia, del núcleo familiar en el que se han criado, de sus vínculos personales y afectivos, etc. Con este conglomerado, el sujeto organiza su personalidad y estructura su propio funcionamiento psíquico. En ese proceso es donde se forjan, tanto, las articulaciones positivas y sanas como las problemáticas o patológicas.

En el método psicoanalítico, se trabaja, conjuntamente con el sujeto, sobre esa base que lo ha conformado para que éste pueda ir encontrando la forma de modificar los fundamentos de su padecimiento y encontrar alivio a su malestar.

Se trabajan tanto las cuestiones que trae el analizante como las que van apareciendo a lo largo de las sesiones, sin que haya juicio o censura sobre ellas. El cuidado y el respeto son la base de la relación analítica.

CONSULTA Y TRATAMIENTO de síntomas y trastornos así como de todo tipo de sufrimiento Psíquico.

Ansiedad, angustia, estrés.

Depresión

Tristeza, sentimientos de soledad

Miedos, fobias, obsesiones

Timidez, inhibiciones

• Crisis, duelos, pérdidas afectivas

• Situaciones de violencia y agresividad

• Cambios del estado de ánimo

• Trastornos de la  personalidad

 

• Problemas de comportamiento o adaptación

• Trastornos del sueño: insomnio, etc.

• Trastornos de la alimentación (anorexia, bulimia)

Adicciones (drogas, ludopatía, alcoholismo, internet)

Conductas de riesgo

Insatisfacción sexual

Problemas de pareja

Conflictos:
     
con los hijos
     familiares
     
en el trabajo